El Caoísmo es una de las vertientes del ocultismo que provienen de la Magia del Caos tradicional. Fue desarrollada por Austin Osman Spare en los años 70 como una especie de magia libre que se basa en destacar los resultados de lo que se pretende conseguir y donde se usa cualquier tipo de creencia con tal de conseguir el éxito. Este tipo de prácticas modernas te dicen que el poder está en tu mente y que la mente es lo único que puede limitarte, por lo tanto te da libertad para practicarla de cualquier manera y bajo el auspicio de cualquier tipo de creencia e incluso mezclandolas. 

Si nos remontamos al siglo XX encontramos que en el año 76 unos jóvenes Peter J. Carroll y Ray Sherwin, sembraron la semilla de esta nueva práctica hasta que se fue haciendo un hueco dentro del camino esotérico, pero como todo hubo un momento en el que se llegó a ver la Magia del Caos como una especie de magia donde no se necesitaba disciplina, era desorganizada y caótica, fue adoptada por aquellos que eran individualistas y que pese a saber que para obtener resultados se necesita un proceso y una disciplina, la gente perezosa y holgazana interpretó a su forma este tipo de corriente mágica donde una frase famosa era repetida de forma constante: nada es verdad, todo está permitido. 

El caos lleva aquí desde el principio de los tiempos, cuando nos vayamos seguirá existiendo, del caos nace todo lo que existe o conocemos, el caos siempre va a reinar porque es algo que no se puede controlar, pero si podemos dominar nuestra mente para que no influya en nosotros. Lo único que tenemos que hacer es engañar a nuestra voluntad para que no sabotee lo que estamos haciendo. 

Seguramente te habrá pasado que en alguna ocasión has querido hacer cosas que por tu educación o tu entorno no estaba bien visto, cuando has querido iniciar algo o sales de tu zona de confort automáticamente aparece el caos en tu cabeza. Te bombardea con pensamientos negativos, frustrantes, te da ansiedad e incluso tu mecanismo de defensa se dispara haciendo que tengas miedo e incertidumbre ante esa novedad. 

En la zona de confort nos sentimos seguros pero no avanzamos, nos quedamos estancados y aquí entra en conflicto nuestra mente consciente con el subconsciente, la mente empieza a limitarte, pierdes el control que creías que tenías y como consecuencia todo aquello que deseas o anhelas nunca llega, porque el subconsciente no deja de bombardearte para que no salgas de esa zona de confort. Si no sales de la zona de confort y no experimentas, tampoco evolucionas, ni tampoco haces esos cambios cuánticos a través del subconsciente que necesitas para tus propósitos. 

Ser caoísta o mago del caos no significa que no creas en nada, al contrario, el gran caoísta tiene fe en lo que hace, tiene bien arraigadas sus propias creencias aunque sean un batiburrillo de muchas culturas, porque realmente sabe que si cree de verdad en ello, es posible materializarlo. Metes en una coctelera la psicología, el misticismo, la cábala, el hermetismo, monoteísmo, chamanismo, la física cuántica y las divagaciones de Spare, lo agitas y ya tienes la magia del caos. Muchos cometen el error de inventarse sus propios procedimientos, no siguen ningún dogma establecido o usan las herramientas como les da la gana. Esto no es ser caoísta. Se confunde caoísmo con anarquismo. 

Un buen caoísta sabe que si se usa una daga para la apertura de un ritual, no podemos cambiar la función que ha tenido esa herramienta desde siempre porque solo porque a esa persona se le ha antojado que a partir de ahora la daga ya no abre rituales, solo es para consagrar agua o pinchar ofrendas por ejemplo. Con esto lo que quiero decir es que hay cosas que tienen su historia y que pertenecen al inconsciente colectivo que es quien le da poder a esa cosa o elemento, por lo tanto lo ideal sería utilizarlo a nuestro favor y con todo su poder, con todo el poder que recibe. Como ya he dicho todo el poder está en nuestra mente y nuestro aspecto psicológico. No puedes llegar y cagarte en todo lo que ya está establecido por aquellos que nos precedieron. 

La magia del caos es como una especie de desprogramación mental y revolucionaria que trata de conseguir el resultado que necesitas. Simplemente tienes un deseo, haces un ritual o un hechizo y esperas los resultados. Si quieren saber más sobre este tipo de magia, muy pronto podréis encontrar un curso en la web.